En el sector de infraestructura, la presente administración ha mantenido el Programa Nacional de Infraestructura 2013-2018 (PNI) cuyo objetivo principal es consolidar a México como una plataforma logística que permita un mayor impulso a la competitividad de nuestra economía: reducir el costo del transporte comercial de bienes y mercancías, apoyar la oportunidad de su entrega, facilitar el arribo y movilidad de turistas y hombres de negocios, así como lograr que el país se introduzca a la era digital transformando por completo los precios, la cobertura y la capacidad de nuestra conectividad a la era de las telecomunicaciones.
Para la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), alcanzar estos propósitos ha enfrentado problemas de diferente naturaleza y de grandes proporciones, como fue sin duda el efecto de la baja en el precio del petróleo, lo que obligó al Gobierno de la República a tomar medidas que permitieran cuidar las finanzas públicas y el equilibrio económico.
Así junto con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, se buscó fuentes alternas de financiamiento de inversionistas privados nacionales e internacionales.
Prueba de ello es la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM), el Nuevo Puerto de Veracruz, la Red Compartida y un gran número de nuevas autopistas, que a través de Asociaciones Público-Privadas han permitido ir realizando las obras.
De esta manera, todos los proyectos establecidos en el PNI siguen en marcha, con una inversión de 1.44 billones de pesos, y la responsabilidad fundamental de la SCT continua en proceso de cumplimiento.
Estos proyectos se sintetizan en 52 autopistas y 80 carreteras con un total de 6,500 kilómetros, la construcción del nuevo Tren Interurbano México-Toluca y el Tren Ligero de Guadalajara, duplicar la capacidad instalada de nuestros puertos para llegar a más de 500 millones de toneladas por año en 2018, son relevantes ejemplos de las obras de infraestructura más trascendentes para el país en los últimos años