El Guadalajara encontró una estruendosa victoria de 4-2 en Monterreyque le servirá de impulso para encarar el cierre del torneo. Isaac Brizuela tomó la batuta, hizo jugar a sus jóvenes compañeros, y éstos le respondieron bien. Noche redonda para los rojiblancos.
Si bien el once local fue el que controló el balón en la mayor parte del encuentro, cometió graves errores defensivos que le acabaron por costar la noche. No pudieron detener a Brizuela ni concretar la mayor cantidad de oportunidades generadas. El Rebaño Sagrado lo agradeció.
El Conejo fue la llave para abrir al equipo regiomontano, ya que por ambas bandas lució incontrolable, al grado que dos anotaciones de Chivas salieron de sus pies. Su primer asistencia fue para que Josecarlos Van Rankin pusiera el 1-0 (44’), y la segunda para que Gael Sandoval se estrenara como anotador en el torneo.
Rayados tuvo un momento de lucidez que le duró poco. Dorlan Pabón logró recortar distancias al minuto 50 y Stefan Medina le dio momentáneamente la vuelta al marcador al 66’. Pero no hubo más.
Hedgardo Marín se encargó de poner la paridad en los cartones nuevamente con un remate de cabeza al 68’, y Sandoval, a pase de Brizuela,le volvió a dar la ventaja a Chivas al 77’.
Para cerrar la noche rojiblanca, Alan Cervantes firmó un golazo para el 4-2. Se coló al centro y sacó un riflazo imposible para Edson Reséndez. Chivas respira.