El astro del fútbol argentino Lionel Messi admitió este martes que el seleccionado de su país ha sufrido «un golpe muy duro» al perder 2-1 ante el representativo de Arabia Saudita, en lo que fue el primer partido de la albiceleste en el Mundial de Qatar 2022.
«Es un golpe muy duro. No esperábamos arrancar de esta manera. Confiábamos en arrancar bien, con los tres puntos. Eso nos hubiera dado tranquilidad, pero este grupo se destaca por la unión, por la fortaleza del grupo. Es momento de estar más unidos que nunca, volver a la base y al juego nuestro para intentar ganar», apuntó.
Como capitán, Messi quiso calmar la decepción de los aficionados y afirmó que el plantel está ya concentrado en el segundo partido, el sábado contra México. «Tranquilidad. Es un golpe muy duro, una derrota que duele, pero tenemos que seguir confiando en nosotros. Este grupo no les va a dejar tirados. Vamos a intentar ganar a México», aseguró.
«Es momento de estar unidos, de pasar página, de no pensar más en esto que pasó. Sí (es momento) para sacar reflexiones, las cosas positivas y para corregir lo que hicimos mal y pensar en México. Siempre dijimos que íbamos a ganar todos los partidos y ahora más que nunca», señaló.
Sobre el partido ante Arabia Saudita, admitió que su equipo tuvo más dificultades de las esperadas
«Sabíamos que podía pasar en el primer partido, no jugar de la mejor manera. No encontramos el juego, el funcionamiento que venimos demostrando durante mucho tiempo. Cuando pasaban los minutos y el tiempo, con el resultado en contra, se hacía más difícil», reconoció.
«Ansiedad»
Messi marcó un penal en el minuto 10. Antes había tenido una buena ocasión, en el minuto 2, y en la primera mitad a Argentina se le anularon tres tantos por fuera de juego, uno a él mismo y dos a Lautaro Martínez. «Eso y alguno de los goles anulados podía haber cambiado toda la historia. Ahora ya no se puede cambiar», lamentó.
«Fue la ansiedad y el partido también. Nos encontrábamos tan fácil con el arquero suyo que nos aceleramos un poquito. Muchas veces caímos en el fuera de juego, que ellos lo hacen muy bien», explicó.
Tras llegar con ventaja argentina 1-0 al descanso, Arabia Saudita remontó en el inicio de la segunda parte, con tantos en los minutos 48 y 53 y a partir de ahí todo funcionó mal para la Scaloneta. «No encontramos un funcionamiento claro, nos costaba jugar. Ellos se encerraban, no dejaban espacios. No encontrábamos la forma de movernos bien de lado a lado».
Messi, en el día en que hacía historia alcanzando el selecto grupo que comparte el récord de participaciones en un Mundial, con cinco, terminó abandonando la zona de prensa del estadio de Lusail visiblemente serio y con la cabeza baja, afectado por una derrota que deja a Argentina en la cuerda floja.