El viceministro de Salud del gobierno de Hamas anunció el lunes la muerte de «siete bebés prematuros» y «27 pacientes en cuidados intensivos» desde el sábado debido a la falta de electricidad en el hospital de Al Shifa, el mayor de Gaza, bombardeado y asediado por Israel.
El hospital de Al Shifa, el más grande de Gaza, ha sufrido cortes de energía en los últimos días, además está sitiado y bajo la amenaza de los feroces combates entre las tropas israelíes y los milicianos del movimiento islamista palestino Hamas.
Los combates entre el ejército israelí y Hamas palestino se concentran en el norte de la Franja de Gaza, donde los hospitales están ahora «fuera de servicio», según Yusef Abu Rish.
Miles de personas parecían haber huido del mayor hospital de Gaza mientras fuerzas israelíes y milicianos palestinos combatían ante sus puertas, pero cientos de pacientes, incluidos docenas de bebés que corrían peligro de morir por falta de electricidad, seguían dentro, según dijeron el lunes las autoridades de salud.
Las comunicaciones funcionaban de forma intermitente y era difícil aclarar las afirmaciones enfrentadas del ejército israelí, que dijo que estaba ofreciendo un corredor seguro para que la gente fuera al sur, y los funcionarios de salud palestinos dentro del hospital, que reportaron un fuego intenso y constante en torno al recinto.
El ejército también dijo que había colocado 300 litros (79 galones) de combustible cerca del hospital para ayudar a poner en marcha sus generadores, pero que milicianos de Hamas habían impedido que el personal del centro llegara hasta los suministros. El Ministerio de Salud en Gaza, gestionado por Hamas, lo desmintió y dijo que el combustible ofrecido habría proporcionado menos de una hora de electricidad.
El director general de la Organización Mundial de la Salud, Tedros Adhanom Ghebreyesus, dijo en una publicación en redes sociales que Shifa llevaba tres días sin agua y “ya no funciona como hospital”.
Otro hospital en Ciudad de Gaza, Al Quds, se vio obligado a suspender sus operaciones el domingo al quedarse sin combustible. La Media Luna Roja Palestina, que gestiona el centro, dijo que las fuerzas israelíes estaban desplegadas cerca y que había preparativos en marcha para evacuar a unas 6 mil personas entre pacientes, médicos y personas desplazadas.