Juan López Mondragón, quien padece Parkinson, revela la situación de los servicios de salud de alta especialidad en el país. Vive en la CDMX y desde 2016 está afiliado al ISSSTE, donde sólo una vez ha podido ver a un neurólogo, a pesar de múltiples trámites que le han solicitado para ir con el médico familiar para, a fin de obtener la referencia al segundo nivel de atención.
Lo enviaron a la Clínica de Especialidades Neuropsiquiatría, pero el médico que lo atendió le dio cita para un año después y cuando regresó ya no había especialista, luego fue al Hospital donde no hay servicio de neurocirugía y lo vio un psiquiatra, quien lo regresó a su clínica familiar. No mejora su salud, pues se ha agravado el problema neurológico provocado por el Parkinson.