Los organizadores de los Juegos Olímpicos Tokio 2020 están conscientes que tienen que vivir con la amenaza de que algún deportista o equipo resulte contagiado por COVID-19, y así como se ha preparado un manual para tratar de reducir el riesgo, también existe un documento para esclarecer las reglas deportivas a seguir en una situación así. Todos los participantes de la justa veraniega están sujetos a un estricto control que incluye pruebas para detectar el coronavirus antes de que asistan a una competencia. La misma Villa Olímpica tiene un edificio preparado para el aislamiento de casos y también hay un protocolo para traslados a hospitales en casos de gravedad.
Para establecer las reglas del juego especiales bajo las condiciones que vivimos, la Comisión Ejecutiva del Comité Olímpico Internacional (COI) llegó a un acuerdo en los pasados días en las que se determinó que ningún atleta o equipo será descalificado por enfermedad, por lo que si no puede presentarse al terreno deportivo se le considerará lo que en inglés se denomina DNF (no comenzó) o su respectiva variante dependiendo el deporte. Para dar continuidad al espectáculo, el lugar que quede vacante será ocupado por el siguiente elemento elegible, lo que permitirá que la lucha por las medallas se defina por las habilidades atléticas y no en la mesa, aunque como en toda regla también habrá excepciones.