Ante el aumento de la inflación que, en la primera quincena de septiembre se ubicó en 3.74%, el Banco de México redujo en 25 puntos porcentuales la tasa de interés de referencia; la ubicó en 7.50%. Señaló que, de continuar la inflación al alza, en octubre valoraría recortes adicionales, a fin de lograr que el pronóstico de la inflación se ubique en 3% al finalizar el año.
En línea con el consenso del mercado, que esperaba un descenso de un cuarto de punto porcentual, Banxico recorta, por décima ocasión consecutiva, la tasa de interés, cuyo ciclo comenzó con el anuncio de política monetaria (agosto de 2024), cuando la tasa de referencia pasó de 11 a 10.75%; la decisión contó con la mayoría de miembros de la Junta de Gobierno.