Los habitantes de la Ciudad de México vivieron este jueves horas de tensión, desesperación y enojo por el caos vial que provocaron las manifestaciones que realizaron centenares de aficionados a la tauromaquia para defender las corridas de toros, peleas de gallos y la charrería; los manifestantes exigen que se respeten sus tradiciones y el trabajo de todos los que se dedican a ese espectáculo; a ellos se sumaron comerciantes ambulantes capitalinos porque se dijeron afectados por la resolución de los diputados del Congreso local y de las autoridades de prohibir ese tipo de eventos que generan fuentes de empleo.
Las manifestaciones iniciaron desde antes del mediodía, pero las protestas más intensas se registraron en las inmediaciones de la Plaza de Toros Monumental de la Ciudad de México, el Congreso capitalino, al que los inconformes lanzaron huevos, y el Aeropuerto Internacional Benito Juárez, donde bloquearon los accesos a la Terminal Uno. A través de una tarjeta informativa, la dirección de Aeropuertos y Servicios Auxiliares, pidió a los usuarios tomar medidas preventivas para no perder sus vuelos; los elementos de la Secretaría de Seguridad y de la Guardia Nacional se mantuvieron a la expectativa para evitar daños a terceros.