Al cierre de las operaciones cambiarias de este martes, el peso mexicano escaló a niveles no vistos desde mayo de 2016 debido a que la paridad Peso-Dólar se ubicó en 17 pesos con 37 centavos por cada billete verde, lo cual es resultado del buen manejo de las finanzas públicas. Con lo anterior, nuestra moneda tuvo una apreciación de 0.46 por ciento, lo que confirma que nuestra moneda sigue siendo la más estable en el mundo con relación a la divisa estadounidense.
De acuerdo con datos proporcionados por el Banco de México, la moneda mexicana se vio alentada por el apetito por activos de mercados emergentes y en medio de un repunte de los precios de las materias primas, sumado al reporte sobre la producción y exportaciones de autos de México. Asì, la moneda mexicana, que hiló cuatro sesiones consecutivas al alza, rebasó el soporte técnico de 17.40 pesos y llegó a operar en un techo de 17.3644 pesos por dólar, un nivel no visto desde mayo del 2016 y un máximo para lo que va del 2023.
Tras perforar el mínimo anual anterior, el peso podría plantear una posible caída (alza) hacia los mínimos (máximos) anuales de 2016 de 17.05, nivel previo a la barrera psicológica de 17.00 unidades”, dijeron analistas de OctaFX en una nota a clientes.