La venta de litros incompletos de gasolina y diesel es la principal irregularidad que ha detectado la Procuraduría Federal del Consumidor en la revisión diaria que hace a estaciones de servicio, por lo cual se han aplicado multas millonarias a los concesionarios, señaló el titular de la Profeco, Ricardo Sheffield Padilla.
Señaló que a los gasolineros que se han negado a la revisión de las bombas despachadoras se les ha multado con 800 milpesos, lo cual no quiere decir que ya con esa salvan la supervisión por en la siguiente visita deben acceder, caso contrario se considerará la cancelación de la concesión.
Explicó que a través de un software, conocido como “rastrillo”, instalado en las bombas despachadoras es como se roba combustible a los consumidores lo que redunda en importantes ganancias a las gasolineras. Se calcula que el 8% de las estaciones de servicio del país cuentan con ese mecanismo para vender litros incompletos, por lo que éste asunto ya está en manos de la Fiscalía General de la República.
Sheffield Padilla advirtió que los empresarios que utilicen el software para robar a sus clientes deben ir a la cárcel.