Seleccionar página

Isaac del Toro cayó al suelo a 300 metros de la meta en la Vuelta a Burgos. Mientras el pelotón cruzaba la línea sin él, un dato más revelador que su raspón circulaba por los canales oficiales del ciclismo mundial: ya es el séptimo mejor ciclista del planeta, según el ranking de la UCI.

En su temporada de irrupción absoluta, Del Toro acumula 3,401 puntos en 2025, dejando atrás a luminarias como Florian Lipowitz, Ben O’Connor, Oscar Onley, Remco Evenepoel y a Richard Carapaz, con quien sostuvo un duelo inolvidable en el pasado Giro de Italia.

Fue precisamente en suelo italiano donde el joven del UAE Team Emirates se consagró como un talento legítimo. Terminó subcampeón, dejando atrás a escaladores consagrados y demostrando que su motor es de largo aliento.

No fue Pogačar quien lo venció, el esloveno no compitió, sino una batalla de resistencia donde Isaac aguantó, atacó y desbordó a todos menos a uno.

Desde entonces, su 2025 ha sido un desfile de hitos: campeón de la Vuelta a Austria, victorias en clásicas como la Clàssica Terres de l’Ebre y el Circuito de Getxo, donde brilló el fin de semana pasado.

Sólo la caída en Burgos, que además arrastró a Giulio Ciccone,  ha interrumpido, por unos segundos, una trayectoria en ascenso constante.