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De acuerdo con los testimonios de trabajadores operativos, administrativos, de niveles medios y altos, enfrentan jornadas de hasta 16 o más horas diarias sin el pago correspondiente del tiempo extra ni bonificaciones. Acusan al nuevo titular de la aduana, el capitán de la SEDENA, Rodolfo Torres Chávez de ejercer presión para que los trabajadores firmen renuncias sin justificación.

Los paristas aseguran que no buscan aumentos salariales ni beneficios extraordinarios, sino el cumplimiento del horario laboral regular de ocho horas y que cese el acoso. Afirman que el actual administrador ha impuesto medidas autoritarias, como exigir presentarse dos horas antes del turno, limitar los tiempos de comida a media hora y mantener una actitud amenazante hacia el personal.