Al rechazar la decisión del gobierno de Estados Unidos de cancelar 13 vuelos del Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles hacia ese país, la presidenta Claudia Sheinbaum exigió respeto para las decisiones mexicanas. “México no es piñata de nadie, a México se le respeta”.
“Estas medidas se tomaron de manera unilateral, podría haber un interés político o de apoyar a sus empresas”. Instruyó al canciller Juan Ramón de la Fuente a reunirse con Marco Rubio, secretario de Estado y el secretario de Transporte para revisar si la decisión tiene fundamento.
Confió que haya entendimiento, al advertir que quieren cancelar más vuelos.
“Hasta ahora hemos logrado un respeto muy grande de distintas instituciones del gobierno de los Estados Unidos, incluida la máxima institución, que es la presidencia de los Estados Unidos, con el presidente Donald Trump y nosotros hemos logrado un buen entendimiento”.
Señaló que la llamada que sostuvieron el sábado “fue muy buena. Ayer él afirmó lo que yo ya había comentado, de que en efecto no se van a poner los aranceles que se habían dicho para el 1 de noviembre y que seguimos trabajando de manera coordinada”.