Las pérdidas acumulada de Petróleos Mexicanos durante los primeros seis meses del año es histórica al ubicarse en más de 606 mil millones de pesos, pero la pérdida neta del mes de enero a junio fue del orden de los 44 mil 300 millones de pesos.
Aunado a lo anterior, durante el mismo lapso la venta de gasolina bajó 59.1%, lo cual se atribuye al confinamiento que ha tenido la gente por la pandemia del coronavirus, ya que al detenerse la actividad económica en áreas no esenciales la movilidad de automotores se redujo y, en consecuencia, se dejo de comprar combustibles.
Los resultados de la empresa petrolera entre abril y junio se deben a la caída en los precios del crudo mexicano y un menor volumen de venta nacional, esto último porque ese periodo abarca las restricciones de movilidad para disminuir el contagio de covid-19.
Por ejemplo, la venta de gasolina bajó 59.1% al ubicarse en 49 mil 910 millones de pesos, a lo que se añade que la importación de crudo cayó 53.6%.
Además, la mezcla mexicana de crudo promedió 23.84 dólares por barril, es decir, 60.1% menos que en el mismo periodo de 2019.
Derivado de esto se observó una disminución en las ventas totales de 51.8% en el segundo trimestre de 2020 como consecuencia de una caída de 54.4% en las ventas nacionales y de 48% en las exportaciones.
En lo que respecta a la producción de petróleo, la empresa se mantuvo en 1.69 millones de barriles diario, lo que significó una caída de apenas 0.2% en comparación al mismo trimestre de 2019.
Mientras que el proceso de crudo en las refinerías de Petróleos Mexicanos subió 6.1% al promediar 631 mil barriles diarios en el segundo trimestre.