El gobierno federal no ha logrado erradicar el robo de gas LP, ya que este combustible se mantiene como uno de los principales objetivos del crimen organizado, lo que ha provocado que, de diciembre de 2018 a noviembre de 2023, se rompiera el récord de este delito al registrarse un acumulado de 10 mil 696 tomas clandestinas.
Esta cifra representa un aumento de 1,574% en comparación a las 639 tomas clandestinas que fueron detectadas en el mismo periodo de cinco años del sexenio anterior, es decir, se ha multiplicado por 16.7 veces. El “huachigas” se registra principalmente en Veracruz, Puebla, Edomex y Tlaxcala, pues son estas las zonas donde también se concentra la mayor demanda.