La cantante fue víctima de la difusión de imágenes explícitas con su rostro creadas con IA, lo que provocó una nueva discusión para crear una ley.Este caso marca un punto de inflexión en cómo la tecnología puede afectar la imagen y la vida de las personas.
Un reciente escándalo ha sacudido las redes sociales, abriendo la discusión sobre la ética en la nteligencia artificial y la privacidad en la era digital. Imágenes explícitas y no consentidas de Taylor Swift, generadas por IA, han llevado a senadores de Estados Unidos a presentar una ley que busca penalizar la difusión de este tipo de ‘deepfakes’.
¿QUÉ SUCEDIÓ CON TAYLOR SWIFT Y LAS IMÁGENES DE IA?
Las imágenes de IA, que mostraban a la artista en situaciones íntimas y sin su consentimiento, fueron compartidas masivamente en redes sociales. La rápida propagación de estas imágenes derivó en un llamado a la acción por parte de los fanáticos y el público en general.
La respuesta fue rápida y contundente, con un grupo bipartidista de senadores estadounidenses proponiendo el Acta ‘Defiance’, que criminaliza la creación y distribución de `deepfakes` sexuales.
¿EN QUÉ CONSISTE EL ACTA ‘DEFIANCE’?
La propuesta legislativa, conocida como ‘Defiance Act’, otorgaría a las víctimas el derecho a buscar reparación civil contra aquellos que produzcan, posean o distribuyan dichas falsificaciones digitales con la intención de compartirlas.
Este movimiento legislativo es un claro mensaje de que la dignidad y la reputación de las personas deben ser protegidas en el entorno digital. El impacto de los ‘deepfakes’ en la vida de las personas es significativo y preocupante.
La facilidad con la que se pueden crear y difundir imágenes falsas pone en riesgo la reputación y la integridad emocional de las víctimas. La propuesta de ley busca dar un paso adelante en la protección de derechos en un mundo cada vez más digitalizado.