Pepe Cabello y Benito Castro dan pistas sobre la relación de Paco Stanley con Amado Carrillo, “El Señor de los Cielos”. Durante las investigaciones por el asesinato de Paco Stanley, una de las teorías que dio luz a especulaciones fue que el conductor de televisión tenía relación con Amado Carrillo, mejor conocido como El Señor de los Cielos, lo cual es asegurado por tres de sus compañeros en la serie El Show: Crónica de un asesinato.
En el documental, Pepe Cabello, quien era productor y amigo de Paco Stanley comentó que el conductor tenía una relación estrecha con el afamado narcotraficante y que inclusive invertía en proyectos de Stanley como un set que construyeron en las calles de la Ciudad de México y quien se encargaba de los materiales de construcción era el productor de televisión.
“Todos los recursos que a mí me llegaban para la construcción del set de producciones provenían de multiservicios PABESA, PA por Paco Stanley, Be de Benito Castro y Sa de Salvador Villalobos, sí era una compañía que tenía los recursos para hacer ese set de producciones, el tenorio, todo lo que se recaudaba estaba ahí”, comentó el productor de televisión.
Más adelante, el productor de televisión cuenta que la parte en la que El Señor de los Cielos invertía en aquellos negocios de Paco Stanley son ciertos, pues un día le tocó a Pepe Cabello visitar el set de producciones cuando estaba en una reunión Amado Carrillo con el conductor de televisión, a quien se refería Stanley como El Señor.
Pepe Cabello contó que ese día Paco Stanley le dijo que iba ir El Señor y fue ese día que lo conoció cuando Paco estaba en la oficina y eso fue todo lo que les contó; sin embargo, en sus últimas declaraciones menciona que muy probablemente el único que tuvo trato con el narcotraficante fue Mario Bezares.
Benito Castro también conoció a “El Señor…”
Por otro lado, en el documental, otro de los actores que habla es Benito Castro, quien dijo que también conoció a El Señor, sin embargo, no especifica que se trataba de Amado Carrillo solo de una persona a la que así se refería Paco Stanley.
El comediante cuenta que un día cuando llegó a la oficina observó que había dos Suburbans estacionadas, un Lincoln y un Cadillac en la puerta de entrada y algunos hombres armados, por lo que su reacción fue de querer irse; sin embargo, Samuel Villalobos, le inquirió que no fuera cobarde y que pasara.
“Abro la puerta, tocó y me dice él es mi compadre fulano de tal, mucho gusto señor, estaba de espaldas a mí, Paco era el que me quedaba de frente, dice mucho gusto señor, adivino que oigo mucho gusto, pero no volteó. Luego oí que ya se fue”, contó.