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El estado de Sinaloa vive una escalada de violencia, intensificada por una serie de acontecimientos, principalmente la extradición a Estados Unidos del fundador del Cártel de Sinaloa, Joaquín El Chapo Guzmán.

Conflictos entre integrantes del crimen organizado, enfrentamientos y homicidios ‘prenden’ la plaza donde el Ejército, así como el nuevo gobierno estatal, admiten que la crisis se debe al reacomodo en la organización que lideraba el que fuera el narcotraficante más buscado del mundo.

El secretario de la Defensa Nacional, Salvador Cienfuegos, adjudicó la creciente violencia en la localidad a disputas internas de la organización criminal del Chapo Guzmán.

«El Cártel del Pacífico, como es conocido, ante la ausencia de su líder, está peleando el mando de la organización, el problema se está dando entre ellos», señaló el secretario.

Cienfuegos se reunió el sábado en Culiacán con el gobernador Quirino Ortiz y el Grupo de Seguridad Sinaloa para revisar acciones como el envío de más efectivos y la reorganización de los operativos ante «los problemas donde se han acrecentado». Se trató de la segunda visita de trabajo del funcionario a la entidad en lo que va del mes.