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A siete meses de concluir su sexenio, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, encabezó la ceremonia de nacionalización de 13 centrales de energía eléctrica adquiridas a la empresa Iberdrola y mediante las cuales será capaz de producir el 56% de toda la energía que requiere el país.

En San Luis Potosí el mandatario federal admitió que alcanzar el acuerdo para la operación de compraventa no fue fácil debido a que los gobiernos del pasado solo pensaban en las altas ganancias de la privatización de empresas públicas y quisieron «hasta desaparecer» a la Comisión Federal de Electricidad.

Sin embargo, dijo que, gracias a los buenos oficios del secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O así como la voluntad del presidente de Iberdrola, José Ignacio Sánchez Galán – presente en el acto de nacionalización –  fue posible concretar la compra de las centrales.

«Afortunadamente, por los buenos oficios del secretario de hacienda y la voluntad de llegar a un acuerdo del director de Iberdrola se logra esta compraventa que nos ayuda mucho porque nos entendimos; nos dimos un entre – no crean – al principio, pero ni él ni yo estamos para pleitos, mucho menos yo que represento los intereses de todo un pueblo. Yo tengo que buscar siempre el bienestar de la gente y llegamos a este acuerdo.

Ahora de 39% de la generación de energía, ya va a ser 56% para el sector público y como estamos con la Comisión Federal por terminar plantas como ésta en distintos puntos del país, vamos a dejar a la CFE, al estado mexicano con una capacidad de generación de energía eléctrica del 65% en 7 meses» destacó López Obrador entre aplausos de los asistentes, incluido el propio presidente de Iberdrola.

El presidente aclaró que la lucha para defender a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) es importante no por el predominio del sector eléctrico sino para mantener los precios en beneficio de los mexicanos.

«¿Y por qué es también importante, no el predominio, sino la participación del sector público? Porque de esa manera podemos controlar los precios de la energía eléctrica. Yo llegué a la presidencia e hice el compromiso de que no iba a aumentar la gasolina, no va aumentar el diésel, no va aumentar la luz, no va aumentar el gas en términos reales y estoy cumpliendo con ese compromiso. No sólo no ha aumentado la gasolina, se ha bajado el precio en términos reales, lo mismo en el diésel», remarcó en su intervención.

«Si tenemos más participación en esta empresa que es del pueblo, podemos tener precios justos, tarifas justas para nuestro pueblo, sobre todo para los más humildes, por eso es importante este acto», subrayó el presidente, quien pidió un aplauso para Sánchez Galán a fin de reconocerle la voluntad que tuvo para vender las 13 centrales al Gobierno de México.